Kinich
Ahau es un sumo sacerdote que vivió entre los mayas en su edad dorada; es
el supremo jerarca del linaje de los sacerdotes solares o Ahaukines.
La
entidad biológica del ser que encarnó Kinich Ahau, fue producto de un cultivo
genético, que resguardo la pureza primordial de los sacerdotes atlantes
conocedores de la energía atómica solar y que llegaron a las costas de la
península de Yucatán, llevando consigo su supremo ministerio.
Varias
generaciones cultivaron la más excelsa semilla, para producir un ser capaz de
tener una bioestructura lo suficientemente poderosa para vibrar en consonancia
con la fuerza solar. Este ser especialmente diseñado, alcanzó a su mayoría de
edad, la capacidad de hacer vibrar dentro de su ser la armónica solar y con
ello reconquistar la refulgencia del espíritu; en ese momento recibe el nombre
sagrado de Kinich Ahau, que para los mayas representa la esencia espiritual del
sol y es elegido como el supremo regente del culto al sol, del linaje de los
Ahaukines.
Su
etimología viene de las palabras Mayas:
Kin = Sol, Energía,
Movimiento, Día, Vibración, Sagrado, Luz.
ich
= Rostro, Faz,
Cara, Reflejo, Espejo.
hau
= Señor, Esencia,
Sacerdote, Guía, Maestro, Instructor.
Uniendo
los diferentes significados podemos conformar una expresión más completa de
Kinich Ahau:
“El Señor con el Rostro
del Sol”,
“El Señor Espejo del Sol”,
“La Luz que Ilumina el Rostro”,
Kinich
Ahau al proceder de la antigua genética atlante, así como también de la
semilla que los seres estelares dejaron sobre la tierra, manifestó una
estructura física alta, robusta, fuerte, de piel blanca y de cabellos rubios,
muy distinta a las características físicas de los nativos del lugar; su
exquisita belleza y sus cabellos dorados como el sol, hacían que el pueblo le
llamara el sacerdote del rostro solar, o el Kinich Ahau.
El
cultivo genético que los antiguos maestros sabían desarrollar era con el
propósito de crear seres de cualidades puras, de fuerzas inconmensurables mas
allá de lo humano, tomando la secuela genética y estructural de los seres de
las estrella que han visitado a la tierra, procedentes de las pléyades, sirio, alfa
centauro, etcétera, por ello vemos que los lideres espirituales son seres
arquetípicos, con las mismas cualidades de gran altura, blancos, de infinita
belleza en su rostro y de un porte soberano, así podemos observar que
Quetzalcoalt, el hombre Dios de la cultura tolteca, poseía estas mismas
características distintas al resto de la población; Wiracocha, entre los guías
espirituales del pueblo andino, quechuas y aimaras, tenia este mismo porte
majestuoso y con características físicas totalmente distintas a los nativos de
esas tierras.
El mismo Jesús el Cristo tiene las características de ser más
alto que el resto de sus discípulos y tener un cuerpo fuerte y robusto, con
rostro bello y misericordioso, de las mismas características estelares que los
otros seres crísticos de las culturas nativas americanas.
Kinich
Ahau se establece en la ciudad sagrada de Uxmal que significa en maya:
Uc
es el aspecto sagrado de la luna (luna mística) y Maal que significa sagrado,
por lo tanto, Uxmal significa "la tierra sagrada de la
luna”. En ese espacio vórtice de poderosa fuerza magnética, son
atraídos los rayos de luz de la mima manera en que la luna atrae los rayos
resplandecientes del sol.
La
figura de KINICH AHAU es UNA y TRINA a la vez, corresponde a:
1. A UN SUMO
SACERDOTE: quién vivió en
las Tierras Sagradas Mayas y tuvo su sede espiritual en la ciudad sagrada de
UXMAL, y su retiro en la Piramide de Ak-he-nah-tún. Llevo a su pueblo a la
Ascensión.
2. EL ESPIRITU
DEL SOL. Representa
la Esencia Divina del Sol de nuestro Sistema, es el "Dador de la
Vida" para nuestro mundo. Y su divina emanación conforma la energía sutil
de nuestro espíritu.
3. EL ESPIRITU
SOLAR DE LA GALAXIA.- Es
la poderosa presencia espiritual que emana el Centro de la Galaxia. El extraordinario
Espíritu de la Galaxia.
Fuente: Eugenia Casarin, Venerable Madre Nah Kin.